Hoy, después de un tiempo sin escribir debido a la falta de tiempo,
por fin puedo seguir definiendo a las personas que hacen día a día que mi interés por
el mundo de la música aumente.
He de reconocer, que al igual que mucha gente, me limitaba a escuchar grupos de música
y interesarme solo por conocer a la cabeza visible, al vocalista, o los cabezas visibles por así
llamarlos de un grupo. Pero cuando me hice más mayor, y empecé a interesarme más por la música
me dí cuenta de que como para construir una casa hay que empezar por los cimientos,
en todo grupo de música hay unos cimientos.
Así fue como empece a descubrir músicos únicos que se esconden detrás de los mejores cantantes
de hoy día.
Uno de estos casos fué Luis, al igual que todos los demás músicos. Con este tema, podría hacer una entrada completa, pero hoy voy a centrarme solo en esta persona. En Luis Dulzaides.
Al igual que con Ludovico un día descubrí que grandes cantantes que había escuchado desde
que tengo uso de razón, repetían músicos. Vi que el ídolo de mi madre, Alejandro Sanz, llevaba a Luis y a Ludo al igual que los idolos de mi padre, que actualmente y desde los 4 años también son los míos.
También los vi en la tele, con otros muchos artistas, y así fue como poco a poco me interese por no solo
las cabezas visibles.
De Luis, a día de hoy, tengo muchas cosas que decir y muchas más por aprender, ya que apenas nos conocemos. Lo que he leído sobre el, me ha llegado a dejar anonadada y verdaderamente he pensado más de una vez: Y yo he tenido el lujo de hablar con este hombre!! y es algo de lo que me siento muy orgullosa.
Sobre ello, puedo decir que es todo totalmente cierto y es un gran músico También debo de citar su amor a las mandarinas y su enorme sonrisa esa que nunca deja perder.
Y ahora, Luis, tengo que decirte que muchísimas gracias por dedicarme esa gran sonrisa en cada concierto, por las mandarinas ofrecidas y por ser tan humilde. Personalmente, también tengo que darte gracias, ya que después de salir deshidratada del concierto en Valencia, volviste a demostrar la humildad llevándome el botellin de agua y evitando que me marease.
Son gestos pequeños, que definen a la persona y verdaderamente son esos los que marcan en la imagen de ver a una persona respecto a los demás.
Me alegra muchísimo estar escribiendo esto acerca de tí ya que considero algo maravilloso el tener la oportunidad de poderte conocer. Tanto a ti como a todos los músicos ya que gracias a vosotros he descubierto que detrás de grandes, hay gigantes.
Eternamente recordaré cada uno de los momentos vividos con vosotros, espero que sean más y que vosotros nunca me olvidéis.
Muchisimas Gracias Luis, sigue así.
Una amiga, Gemma.
